En la comedia «La Mandrágora» Nicolás Maquiavelo, haciendo honor al término que lleva su nombre el «maquiavelismo», consigue una obra de teatro del género de la comedia, aunque con muchos matices que la podrían posicionar también en otros géneros.
Maquiavelo nos plasma la picardía y malas artes de un joven que queda prendado por la hermosura de una joven que está casada con un viejo rico con el cual, no puede tener hijos. Así que con gran astucia idea un «maquiavélico» plan, (nunca mejor dicho), para poder acostarse con esa mujer.
Así pues, ayudado directa o indirectamente por todos los personajes de la obra, el joven consigue acostarse con esa joven, a la cual le comunica todo el amor que siente por ella, y esta correspondiéndole pasa a ser su amante.
La obra está muy bien conseguida, pero como muchas otras obras clásicas, hay que leerla con la mentalidad de cuando se escribió, pues en la actualidad toda la obra está muy desfasada, pues la trama ahora no tendía sentido y la manera en cómo se resuelve la misma, tampoco.
De todas maneras, La mandrágora, de Nicolás Maquiavelo es todo un gran clásico del teatro que hay que ver y leer, pues en ella encontraremos al genio que la escribió y que ha marcado la historia.