Un gran poemario que me sorprendió gratamente al encontrar poesías cercanas que tenían como base principal y fundamente las tierras de Castilla en España, descritas por un sevillano que vivió en París y Madrid.
Campos de Castilla es un magnífico poemario para disfrutar de todas sus poesías, en las cuales, encontramos un Antonio Machado que cultiva tanto la poesía rimada y medida como las poesía blanca y libre con tanta soltura y maestría en ambos estilos que realmente es todo un placer degustar el libro entero.
En el poemario Campos de Castilla, también encontraremos algunos poemas con dedicatoria que tienen un destinatario final como el poema Las Encinas, cuya dedicatoria va para los señores de Masiera. O, Amanecer de otoño, que está dedicado al gran pintor Julio Romero de Torres. Entre otras dedicatorias.
Los poemas de este bello poemario, son variopintos en tamaño, donde podemos encontrar unas muy breves poesías de unos pocos versos, como largos poemas de multitud de versos. Y en esta categoría encontramos el emblemático poema Campos de Soria, que cuenta con 144 versos divididos en nueve secciones, con el que nos transmite la nostalgia de una vida intensa a la vez que nos da una imagen detallada del campo castellano.