Cuando he buscado información sobre la época nazi, la que conseguía siempre era a través de los prisioneros de los campos de concentración. Pero con este libro he descubierto una perspectiva totalmente diferente en la cual no había pensado nunca, la de los familiares y amigos que estaban esperando fuera de los campos de concentración a que salieran sus seres queridos o les comunicaran su muerte.
A través de este libro he descubierto el sufrimiento y el dolor de una mujer cuyo marido está prisionero en un campo de concentración. He vivido a través de ella el padecimiento de su espera, el hecho de no saber qué le podría estar pasando, si estará vivo o muerto… una mente atormentada que no descansaba nunca.
Las atrocidades que durante la guerra se llegan a cometer y cómo una persona se transforma por culpa de ella.
El regreso de los prisioneros y el estado en el que se llegan, tanto físico como mentalmente y la incertidumbre de saber si llegarán a superarlo.
El vivir día a día con estas personas, ver cómo sus cuerpos están tan mal e intentar que poco a poco mejoren, pero… todo ha cambiado por ambas partes.
También viviremos su día a día en la resistencia, todo lo que piensa sobre la ocupación de Francia por los alemanes, sus pensamientos, miedos…