«A buen juez, mejor testigo» es una leyenda plasmada magistralmente por el poeta y dramaturgo José Zorrilla. En un principio estuvo incluida en un poemario mucho más extenso llamado «Poesías», mas, en poco tiempo se constituyó como un poemario independiente, bastante breve pero precioso, siendo, bajo mi criterio, un poemario que todos los amantes a la buena poesía, esa que capta toda tu admiración, debería leer.
Es una sola y extensa poesía compuesta con versos octosílabos que, narra las desventuras de una doncella a la que un galán le quita su «honra», cosa que en los tiempos en que se escribió la obra, era algo que realmente marcaba a la mujer. Mas, cuando ella le pide que repare su honor con una boda, el galán se va a la guerra y no vuelve cuando le dice que lo haría, y cuando lo vuelve a encontrar de nuevo pasados muchos años, tan sólo Dios pudo ser testigo de la fechoría del galán.
Realmente es una historia muy tierna llena de amor, sobre todo de amor no correspondido, sentimiento que te llegará al corazón.
La maestría de Zorrilla a la hora de componer poesía se nota sobremanera en este trabajo, pues la cadencia de los versos y su musicalidad hacen que la lectura sea muy agradable y llena de encanto.
No dejes de leerlo.