Todos los amantes de la poesía, sin lugar a dudas, habremos leído poesías de los grandes poetas universales, pero evidentemente no fueron los únicos que compusieron poesía, y este libro lo que trata de poner en valor es a catorce poetas que Ignacio Arellano Ediciones, califica de segundones, es decir, de esos poetas que por el motivo que fuere, no llegaron a tener su momento de esplendor y poder brillar con luz propia como sí lo hicieron los grandes.
Pero tras sumergirme en el mundo de este inmenso poemario, (casi 500 páginas), he podido comprobar que, muchos de estos poetas bien podrían haber estado entre los de primera fila, pues su poesía, en general, me ha parecido muy buena, y el tono burlesco que utiliza es comparable a cualquiera de los que todos hemos leído como pueda ser Góngora o Quevedo. Así que, es muy posible que no brillaran por que su poesía no fuera buena, sino porque no supieron «venderse» bien, o porque por algún motivo fueron marginados del primer nivel poético.
Y, por romper una lanza en pro de estos «segundones», puedo decir que he leído poesías de poetas de primera fila, que me han parecido totalmente prescindible.
De lectura imprescindible para todas aquellas personas que deseen tener una visión de conjunto más amplia de la poesía del Siglo de Oro español.