En un pueblo hay una casa que todos asumen que está encantada, pues quien fuera su dueño, el señor Manton, un día degolló a su mujer y sus hijos, marchándose luego de allí. A continuación, Bierce nos plantea un duelo entre dos personas que, con un cuchillo de monte se enfrentarán dentro de una casa, la casa Manton, para que nadie los moleste mientras uno debe acabar degollando al otro.
A su vez, el autor nos va planteando algunas cosas que no parecen tener demasiada conexión entre ellas, pero lo cierto es que al final del relato, nos podremos dar cuenta de que sí están conectadas y que la persona a la que hace referencia el título de la obra «El dedo medio del pie derecho», es la clave de todo.
Un cuento, un relato corto pero intenso en el que Bierce no da respiro al lector, planteando las situaciones muy seguidas y explicando lo justo de cada una, para que los lectores sepan de ellas sin profundizar, pues no es el fin de la obra.
Dentro del género de terror del que podemos encontrar en la época en que fue escrito, es un muy buen relato y además, como habla de fantasmas y de casas encantadas, no se nota en exceso en él el paso del tiempo, pudiendo decir que sigue siendo actual.