Este escrito muestra una cúpula de ideas alrededor de la traición, la vanidad y el engaño, todo ello recae sobre el asesinato inesperado del Conde Wilhelm von Breysach que por un momento quedó impune debido a que no se daba con el autor de aquel vil hecho. Tras un largo tiempo de investigaciones, gracias a la flecha que quedase como evidencia y arma homicida, se fueron atando los cabos hasta que la culpa recayese sobre su hermano Jakob Barbarroja; quien aspiraba a la corona bajo cualquier circunstancia.
Ligados al candidato bastardo se encontraban varios personajes a los que en el transcurso de la historia afectó de cierta manera, ya fuera por círculos amorosos, lealtades comprometidas; decesos colaterales e invalidación hereditaria. Por aquellos lares del siglo XVI, la clerecía llevaba el control de los actos que ocurriesen desde la corona hasta los aspectos judiciales, por lo que traicionar uno de sus mandamientos conllevaría al término de la vida sobre la sagrada hoguera.
A pesar de denominarse un policiaco involuntario, es un relato donde impera el suspense, logrando que el lector no despegue la mirada ni un segundo de sus páginas. Por su parte, el lenguaje del contexto es muy rico en recursos teniendo a la metáfora y la adjetivación como sus puntos de partida, aunque en la actualidad esta última se haya querido desechar un poco.