Este libro es uno de los primeros trabajos de Platón, el cual, tuvo como maestro a Sócrates, quizá por ello que uno de los dos personales, el más culto e inteligente, es Sócrates. El otro personaje es Ion, un rapsoda que va por los pueblos recitando poemas, y ensalzando a Homero como el mejor poeta de toda la historia, al cual tiene en muy alta estima.
Ion le dice contento a Sócrates que ha ganado el primer premio de un certamen de rapsodas y que, además es un ferviente seguidor de Homero, pero Sócrates de una manera bastante compleja pero efectiva, le hace comprender que igual que es un ferviente seguidor de Homero, lo podría ser de cualquier otro, y para ello utiliza una gran retórica e incluso algunos ardides dialécticos y de pensamiento, a los que Ion, no sabe cómo responder ni abordar, llegando un momento en que Sócrates le hace ver a Ion, que al final de la conversación, está diciendo totalmente lo contrario de lo que dijo al principio.
Este es un muy buen ejemplo de cómo una persona con un gran intelecto y conocedor de mil y un recovecos de la comprensión humana, puede llegar a convencer a otra persona de algo que en un principio no estaba de acuerdo, y que, seguramente nunca lo hubiera estado. Un placer leerlo.